Condromalacia rotuliana: causas, síntomas, tratamiento y prevención desde la fisioterapia

¿Qué es la condromalacia rotuliana?

La condromalacia rotuliana, también llamada síndrome femoropatelar o rodilla del corredor, es una lesión común del cartílago que recubre la parte posterior de la rótula. Este cartílago actúa como una superficie deslizante entre la rótula y el fémur. Cuando se reblandece, degenera o inflama, aparece dolor, especialmente al realizar ciertas actividades que implican flexión repetida de la rodilla.

Afecta tanto a deportistas como a personas sedentarias, siendo especialmente frecuente en:

  • Corredores/as
  • Ciclistas
  • Adolescentes (por cambios en la alineación durante el crecimiento)
  • Personas con sobrepeso o que trabajan mucho tiempo sentadas o de cuclillas

¿Por qué aparece la condromalacia rotuliana?

Los factores que más influyen en su aparición son:

1. Desequilibrios musculares

  • Debilidad del cuádriceps, especialmente del vasto medial
  • Falta de control del glúteo medio y core, que afecta a la alineación de la pierna

2. Alineación incorrecta

  • Genu valgo (rodillas en «X»)
  • Pie plano o hiperpronador que altera la mecánica de la cadena cinética

3. Sobrecarga mecánica

  • Repetición excesiva de movimientos de flexo-extensión sin descanso adecuado
  • Uso de calzado inadecuado o superficies duras en entrenamientos

4. Alteraciones estructurales o traumáticas

  • Displasia de rótula
  • Lesiones anteriores de rodilla
  • Cirugías previas o luxaciones

Principales síntomas

Los pacientes que sufren condromalacia rotuliana suelen referir:

  • Dolor en la parte anterior de la rodilla, sobre todo al:
    • Subir y bajar escaleras
    • Arrodillarse
    • Permanecer mucho tiempo sentados (signo del cine)
  • Chasquidos o crujidos al mover la rodilla
  • Sensación de bloqueo o inestabilidad
  • En ocasiones, hinchazón o derrame articular leve

Diagnóstico fisioterapéutico

En nuestra clínica de fisioterapia en Majadahonda realizamos:

Valoración funcional

  • Exploración de la rótula, alineación, tono y movilidad
  • Tests específicos como Clarke, Zohlen, palpación de la faceta interna de la rótula
  • Análisis de la marcha y de la mecánica de carrera (si aplica)

Estudio de fuerza y control motor

  • Evaluación de glúteo medio, cuádriceps, isquiotibiales y core
  • Pruebas de control postural y estabilidad en apoyo unipodal

Complemento diagnóstico (si es necesario)

  • Resonancia magnética para valorar grado de afectación del cartílagoEcografía musculoesquelética

Tratamiento fisioterapéutico

En la fase inicial (control del dolor)

  • Terapia manual para descompresión femoropatelar
  • Electroterapia analgésica (TENS, US)
  • Crioterapia
  • Vendaje neuromuscular o funcional para descargar la rótula
  • Educación sobre actividad: evitar escaleras, cuclillas, saltos

La fase intermedia (recuperación funcional)

  • Ejercicios de fortalecimiento excéntrico del cuádriceps
  • Trabajo progresivo de glúteo medio y core
  • Estiramientos guiados de isquiotibiales, cuádriceps, fascia lata y sóleo
  • Reentrenamiento de la biomecánica: subir/bajar escaleras, técnica de sentadilla

Por último, en la fase avanzada (retorno a la actividad)

  • Ejercicios de impacto progresivo (salto, running)
  • Reentrenamiento de la carrera, técnica de apoyo y cadencia
  • Estabilización dinámica de rodilla en ejercicios funcionales

Técnicas complementarias

  • Punción seca para puntos gatillo
  • Readaptación personalizada en sala o domicilio
  • Estudio de calzado o plantillas si es necesario

Educación y prevención

Uno de los pilares clave es educar al paciente, con pautas claras como:

  • Evitar el reposo absoluto: mantenerse activo con ejercicios adaptados
  • No entrenar con dolor o si hay signos inflamatorios
  • Usar calzado con buena sujeción y amortiguación
  • Realizar ejercicios de movilidad y fuerza de forma regular
  • Incluir rutinas de estiramiento tras el deporte

¿Se puede prevenir?

Sí. Estas acciones reducen significativamente el riesgo:

  • Fortalecer cuádriceps y glúteos al menos 2 veces por semana
  • No incrementar el volumen de entrenamiento bruscamente
  • Corregir desequilibrios posturales o gestos repetitivos
  • Hacer pausas activas si trabajas muchas horas sentado
  • Controlar el peso corporal para evitar sobrecarga articular

¿Cómo te ayudamos en nuestra clínica?

En Clínica de Fisioterapia Mariano Caldés (Majadahonda) tratamos a diario casos de condromalacia rotuliana con un enfoque personalizado, basado en evidencia científica y experiencia clínica.

Lo que ofrecemos:

  • Valoración biomecánica completa
  • Plan de ejercicios individualizado
  • Tratamiento manual y tecnología avanzada
  • Acompañamiento durante toda la recuperación
Clínica de fisioterapia en Majadahonda especializada en recuperación física y bienestar

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